4.- Durante el procedimiento
Un peeling químico es un procedimiento médico durante el cual se aplican productos químicos seleccionados sobre la piel (ácido glicólico, mandélico u otros ácidos orgánicos), con el objetivo de mejorar la condición de la piel debido a la cual se indicó este procedimiento.
Después del peeling se renueva la epidermis y se potencia la arquitectura de la dermis debido a la mayor biosíntesis de colágeno y ácido hialurónico, lo que permite la remodelación de la piel.
El efecto del peeling químico depende de a qué profundidad se logra el peeling. Por lo tanto, el resultado del peeling puede mejorar la textura y la hidratación de la piel, una apariencia más joven, pero también la eliminación de arrugas menores y trastornos de pigmentación causados por la exposición a la luz solar.
De acuerdo con la profundidad del peeling, distinguimos peelings químicos muy superficiales, superficiales, medianos y profundas.
EL PEELING MUY SUPERFICIAL afecta la parte más superficial de la epidermis, es decir la capa de células muertas de la piel que generalmente se pela.
EL PEELING SUPERFICIAL actúa dentro de la epidermis, pero no penetra en sus capas más profundas.
EL PEELING MEDIO actúa en el nivel dermoepidérmico.
EL PEELING PROFUNDO actúa dentro de la dermis.
El efecto del peeling en la piel lo determina el médico y lo adapta individualmente a cada paciente. De esta manera, con una combinación de varios efectos terapéuticos de los peelings, es posible obtener un excelente efecto de rejuvenecimiento de la piel, sin irritación y sin restricciones en la vida cotidiana.